Hoy, en el Día Internacional de la Democracia, resulta imperante hacer un alto y reflexionar sobre un sistema de gobierno que muchas veces se percibe como el ideal. Tras cinco años de trabajo fomentando la participación democrática de jóvenes en diversas naciones, puedo afirmar que el panorama es complejo.

Democracia: Entre el Ideal y la Realidad, ¿Qué Podemos Hacer?

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Hoy, en el Día Internacional de la Democracia, resulta imperante hacer un alto y reflexionar sobre un sistema de gobierno que muchas veces se percibe como el ideal. Tras cinco años de trabajo fomentando la participación democrática de jóvenes en diversas naciones, puedo afirmar que el panorama es complejo.

El Doble Filo de la Democracia

La democracia funciona como un doble filo. En su versión ideal, nos habla de una sociedad donde el poder reside en el pueblo, donde cada voz tiene igual peso, y donde los derechos y libertades están asegurados para todos. No obstante, en la práctica, la democracia puede tornarse en una herramienta manipulable, utilizada para consolidar el poder o incluso, paradójicamente, para socavar la propia democracia.

El Espejismo de la Representatividad

La democracia representativa, ese modelo en el que elegimos a líderes para que tomen decisiones en nuestro nombre, muestra fisuras. La sensación de que muchos ciudadanos no se sienten representados es palpable, lo que puede dar paso a sistemas excluyentes que perpetúan el poder en manos de unos pocos. En ocasiones, esta ‘democracia’ no es más que una fachada en regímenes claramente autoritarios, como es el caso de Venezuela y Nicaragua.

Autoritarismo: ¿Una Opción Viable?

Países como China y Qatar, con sistemas autoritarios, nos ponen frente al dilema de la eficacia versus la ética. Estos países muestran niveles de estabilidad y desarrollo económico que podrían hacer pensar que la democracia no es la única vía hacia el progreso. Pero no podemos olvidar el coste en derechos humanos y libertades individuales que supone ese ‘orden’.

Acciones Para una Democracia Real

Educación Cívica

Primero y fundamental, debemos educar a la sociedad, en especial a los jóvenes, sobre la democracia en toda su complejidad. Votar es solo el principio.

Transparencia y Rendición de Cuentas

Es imperativo implementar sistemas transparentes y responsables, que disminuyan las brechas para la corrupción y el abuso del poder.

Inclusión Social

Los grupos subrepresentados deben tener un lugar en la toma de decisiones.

Descentralización del Poder

Cuanto más cercanas estén las estructuras de poder a la gente, más directamente podrán impactar en su bienestar.

Reformas Electorales

Un sistema electoral justo y representativo puede ser la llave para reconfigurar el panorama político.

Vigilancia Ciudadana

La sociedad civil debe ser el ojo crítico que evalúe y supervise la actuación de sus líderes.

¿Es posible el Cambio?

La democracia, como sistema, está en constante evolución. Existen en el mundo esfuerzos para perfeccionarla, desde la adopción de tecnologías de votación más seguras hasta propuestas para una democracia directa. El cambio es factible, pero demanda un compromiso sostenido de una ciudadanía informada y activa.

Finalmente, la democracia requiere de todos nosotros: jóvenes y mayores, gobernantes y gobernados. Aunque la tarea sea difícil, la recompensa —una sociedad más libre, justa e igualitaria— justifica con creces el esfuerzo.

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Por: Paul Rodriguez

Categories: Columna

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